sábado 28 de agosto de 2010
La Confitería Torres sigue teniendo intacta su fachada original
Claudio Soto, el dueño de la Confitería Torres, va a celebrar los doscientos años de Chile en grande: la Pérgola del Bicentenario será un evento de gastronomía y cultura, pensado para que los chilenos olviden los malos ratos del año.
Sentía que era necesario celebrar. Claudio Soto, el dueño de la Confitería Torres, pidió audiencia con el alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, para festejar las fiestas del Bicentenario en el centro de la ciudad: le pidió una cuadra del bandejón central de la Alameda y celebrar allí, como hace 100 años, el día nacional de Chile.
"Hablé con él y se mostró entusiasmado", recuerda. "Yo sentía que tras el terremoto, el mundial de fútbol e incluso ahora con el tema de los mineros, hay ánimo de celebrar y de abrazar la bandera. Con estos eventos se ha producido un deseo de sentir en la piel los valores de Chile. Y qué mejor que en el centro de Santiago".
Lo llamó "La pérgola del Bicentenario"
La idea le surgió al investigar sobre la celebración del Centenario. En esa oportunidad los bandejones de la Alameda de las Delicias, hoy avenida Libertador Bernardo O'Higgins, sirvieron como plataforma para las festividades. Allí se congregó el pueblo y las clases más acomodadas, y la tradición se mantuvo hasta que el alcalde de la ciudad, Ismael Valdés Vergara, las prohibió y las mandó al Parque O'Higgins un par de años más tarde. La tradición se fue al tacho, hasta ahora.
"El fin último es devolverle la calidad de paseo al bandejón central. La idea es que entre el 16 y el 20 de septiembre, entre 11 de la mañana y doce de la noche, la gente pasee por el centro de la ciudad y ocupe la Pérgola del Bicentenario como un centro gastronómico y cultural", explica. "Y qué mejor que en el centro, que es la proyección más fiel de la República".
El lugar va a tener comidas y tragos típicos, pero también emitirán películas de los años veinte; mostrarán fotos y videos con las costumbres del Centenario. Ofrecerán desayunos de marraqueta con palta y bebidas como el "pajarete". En la Pérgola pretenden celebrar sin olvidar lo que Chile ha sido.
"No podemos pensar en ser un país global si olvidamos la identidad que poseemos", dice. "Y una cosa es clara: los chilenos sentimos que es momento de tener una fiesta. Ante tantas pérdidas y dolores, la gente quiere sentirse feliz, y en la pérgola queremos que eso suceda".
-
No hay comentarios:
Publicar un comentario