La Segunda online
Viernes 26 de Febrero de 2010
"Alguien procuró que la muerte de Agustín Arrau (albacea del pianista) permaneciera en las sombras, seguramente para ganarnos terreno en la adquisición de algunas piezas", afirma el alcalde de Chillán.
Por Miguel Ortiz A.
Partituras corregidas de su puño y letra, escritos sobre teoría musical, herramientas de afinación, recuerdos de familia, trajes de gala... y un magnífico piano de cola en el que interpretó sus últimas notas, antes de morir en Austria, en junio de 1991.
El "tesoro" de Arrau incluye el piano en el que tocó sus últimas interpretaciones.
Es el culturalmente invaluable legado que el pianista chillanejo, uno de los más grandes del siglo pasado a nivel mundial, Claudio Arrau León, dejó en manos de su sobrino Agustín Arrau en Estados Unidos y del cual hoy se desconoce su paradero tras la muerte en mayo pasado de quien fuera su "albacea".
Mientras la Municipalidad de Chillán hace lo imposible por recuperar este "tesoro" a través de Cancillería, han surgido nombres de particulares que -conocedores del valor monetario de las piezas- estarían interesados en sacar provecho económico de ellas.
Por eso, según lo plantea el ex alcalde de esa ciudad y actual diputado, Rosauro Martínez , "es urgente, esté donde esté, que el legado del maestro vuelva a Chile tal y como el propio Arrau lo manifestó en reiteradas ocasiones. Hay que encontrarlo y custodiarlo, porque es parte de nuestro patrimonio".
Las piezas que conforman el legado, de hecho, conforman un conjunto "muchísimo más valioso" que los objetos que hoy repletan el «Museo Claudio Arrau», de propiedad municipal, según aseguró un miembro de su directiva. Más aún: ya está proyectada una ampliación del edificio para recibir a la hoy "esfumada" herencia.
Alerta surgió hace dos meses en Chillán
Viernes 26 de Febrero de 2010
"Alguien procuró que la muerte de Agustín Arrau (albacea del pianista) permaneciera en las sombras, seguramente para ganarnos terreno en la adquisición de algunas piezas", afirma el alcalde de Chillán.
Por Miguel Ortiz A.
Partituras corregidas de su puño y letra, escritos sobre teoría musical, herramientas de afinación, recuerdos de familia, trajes de gala... y un magnífico piano de cola en el que interpretó sus últimas notas, antes de morir en Austria, en junio de 1991.
El "tesoro" de Arrau incluye el piano en el que tocó sus últimas interpretaciones.
Es el culturalmente invaluable legado que el pianista chillanejo, uno de los más grandes del siglo pasado a nivel mundial, Claudio Arrau León, dejó en manos de su sobrino Agustín Arrau en Estados Unidos y del cual hoy se desconoce su paradero tras la muerte en mayo pasado de quien fuera su "albacea".
Mientras la Municipalidad de Chillán hace lo imposible por recuperar este "tesoro" a través de Cancillería, han surgido nombres de particulares que -conocedores del valor monetario de las piezas- estarían interesados en sacar provecho económico de ellas.
Por eso, según lo plantea el ex alcalde de esa ciudad y actual diputado, Rosauro Martínez , "es urgente, esté donde esté, que el legado del maestro vuelva a Chile tal y como el propio Arrau lo manifestó en reiteradas ocasiones. Hay que encontrarlo y custodiarlo, porque es parte de nuestro patrimonio".
Las piezas que conforman el legado, de hecho, conforman un conjunto "muchísimo más valioso" que los objetos que hoy repletan el «Museo Claudio Arrau», de propiedad municipal, según aseguró un miembro de su directiva. Más aún: ya está proyectada una ampliación del edificio para recibir a la hoy "esfumada" herencia.
Alerta surgió hace dos meses en Chillán
El alcalde de Chillán, Sergio Zarzar.
La voz de alerta surgió hace apenas dos meses, cuando el alcalde de Chillán, Sergio Zarzar , se dio cuenta de que había perdido el contacto con Agustín Arrau, con quien había acordado mantener un permanente vínculo para coordinar el regreso desde Seattle de las posesiones del gran intérprete chileno. "Yo hablé con él en abril del año pasado y quedó en venir a Chillán, reunirnos y concretar el sueño de su tío: que las cosas pudieran ser admiradas en el museo", asegura la autoridad.
Por esa época comenzó a correr con fuerza el rumor de que en el portal de compra-ventas «e-Bay» se ofrecían algunos valiosos artículos del pianista... su sobrino, por problemas económicos, había decidido "liquidar" varios documentos.
Había que actuar con rapidez. Algo que -según le critican ahora al alcalde Zarzar- se debió haber hecho desde un comienzo y no después de que se confirmara, hace escasas dos semanas, el deceso del "albacea" (que habría fallecido tiempo después de haber sufrido un accidente automovilístico, debido a complicaciones que no pudo superar).
Como protagonista de la historia surgió el nombre de Christopher Arrau, el único hijo vivo del pianista, que vive en Estados Unidos y administra "Arrausing", una empresa de productos electro-computacionales.
Al enterarse de que las pertenencias de su padre estaban en una suerte de "limbo", tomó contacto con el municipio de Chillán para aclarar que formalmente, y tal como está estipulado legalmente en Norteamérica, los objetos pasaban a sus manos... y que él dispondría que regresaran a la ciudad natal de Claudio Arrau.
Pero no será fácil. "Me he enterado de que el hermano de Agustín, Carlos, está tratando de apoderarse de estos bienes", dijo la semana pasada Christopher Arrau.
Para hacer más intrincada esta historia, surgió el nombre de Heber Ramos, comerciante del sur de Chile que asegura tener la venia del compositor para que sea él quien administre su patrimonio . ¿Sus pruebas? Una serie de papeles firmados ante notario por Agustín Arrau en la que, supuestamente, se conforma la «Fundación Claudio Arrau»... entidad presidida por Ramos. También el dominio de la página web www.claudioarrau.cl debiera quedar a su nombre.
¿Qué dice el documento que posee Heber Ramos?
Este es el documento, firmado por el "albacea" del pianista, que posee Heber Ramos.
En Chillán, en todo caso, aseguran que Ramos sólo "se avivó" e inscribió la página a su nombre. El documento, en tanto, no sería otra cosa que una autorización de 1990 del propio Claudio Arrau para que Ramos fundara una radioemisora local con su nombre.
"Sospechosamente", tal como lo contó a "La Segunda" una investigadora a quien se le encargó la misión de reconstruir esta historia, "el señor Ramos lleva meses viviendo en Estados Unidos y está muy al tanto del caso. Se trata de un caza-fortunas que ha trabajado en las sombras, auxiliado por el descuido inicial que tuvieron las autoridades municipales".
Gabriela Ramos Basualto -hija de Heber-, si bien admite que su padre está en EE.UU. desde mediados de 2009, sostiene que el viaje responde a "motivos religiosos" y que "en ningún caso anda tras los bienes de Claudio Arrau".
El diputado Rosauro Martínez.
El diputado Martínez, quien también solicitó ayuda diplomática a nuestro canciller, Mariano Fernández, para resolver este entuerto, considera que "cada minuto que pasa es fatal. Todavía queda por dilucidar dónde está físicamente el legado. No hay claridad al respecto y yo espero que pronto tengamos noticias de ello".
El temor lo comparte el alcalde Zarzar: "Sería gravísimo que este tema se dilatara aún más. No hay tiempo que perder. Ya estoy realizando los contactos con las autoridades del nuevo gobierno para que se le entregue cierta prioridad a eso. ¡Es Claudio Arrau! No podemos renunciar a su patrimonio".
Por US$25 se puede comprar en «e-Bay» este retrato autografiado por el músico. No encontramos nada de mayor valor...
"La Segunda" buscó profusamente en «e-Bay» alguna pertenencia de Arrau: lo único valioso que encontramos fue un retrato autografiado y una antigua partitura que, si bien se asegura que perteneció al pianista, no hay pruebas patentes de ello.
Como el de Herber Ramos -a quien "La Segunda" intentó contactar infructuosamente- existen otros nombres de particulares interesados en conservar el legado de Arrau. "He sabido de varias otras personas que ven sólo el valor económico y no les interesa el tremendo aporte cultural que hay detrás de todo esto", dice el parlamentario.
Y el alcalde va incluso más allá: sin querer entregar nombres, Zarzar sostiene que "hubo un silencio en todo esto. Alguien procuró que la muerte de Agustín Arrau permaneciera en la sombras, seguramente para ganarnos terreno en la adquisición de algunas piezas".
Será Cristopher Arrau quien tendrá la última palabra en este enredo. Pero sólo si manifiesta formalmente su consentimiento para que el tesoro de su padre quede en tierras chillanejas... y si el legado es finalmente localizado.